miércoles, 29 de noviembre de 2023

En la senda perdida



En la senda perdida de tu boca

imagino batallas con mi pluma

 escritas sobre un folio en blanco, 

contando la crónica

 de lisonjas que son derrotadas

en los límites de mi tinta y tu piel.


Mis palabras de promesas y anhelos,

ofrendas sin armadura, 

se estremecen temblorosas,

pretendiendo las caricias de tus besos,

y con tus besos, 

desfallecen vencidas, 

abatidas en tus labios.


lunes, 27 de noviembre de 2023

Me miró, la miré,

 



Me miró, 

la miré, 

fue  un fugaz encuentro,

que duró un destello,

efímera pasión inmortal,

en un respiro tan breve, 

que quise retenerla

toda la vida,

para amarla, 

arrojado,

sin final,

 con plena sinrazón, 

con irremediable necesidad. 


Me miró, 

la miré, 

y  nos consumimos

por siempre,

en la eternidad

 persistente de un instante.

 



viernes, 24 de noviembre de 2023

El alma perdida



 El alma nada desorientada

 en el silencio

del llano de la desierta noche,

y  un corazón furtivo parpadea,

se consume,

se apaga,

helado y herido,

bajo la brisa de las estrellas.


No hay testigos

llorando sus penas,

y amanece el olvido,

el rocío, araña mi piel, 

bajo el ébano del cielo,

y en la tierra,

apago mi sed.



sábado, 18 de noviembre de 2023

La casa del columpio.




 Paul había estado inquieto durante toda la mañana, se levantaba repetidamente, acomodaba la leña en la chimenea y miraba recelosamente hacia la ventana. Allí estaba Marie, hasta no hace mucho su esposa, que permanecía en silencio, de pie y silenciosa desde las primeras horas del día. 

El aroma en la cabaña evocaba recuerdos y emociones pasadas; el humo dulce de la chimenea se entremezclaba con una fragancia cálida y familiar junto a los olores de una vieja lata ennegrecida que contenía un puñado de castañas crepitando lentamente al fuego, acentuando la atmósfera tranquila, pero tensa de la habitación,

La vida de Marie, en las útlimas semanas, se había convertido en una rutina repetitiva y monótona, se levantaba muy temprano, antes de las primeras luces del alba, encendía la hoguera, calentaba un poco de agua y se dirigía con su taza de té hacia la ventana, envuelta en el silencio y sin pronunciar palabra. Pareciera mirar hacia el horizonte, pero Paul sabía que solo observaba el columpio, un regalo hecho a mano de su abuelo, de quien heredó la cabaña años atrás, y Marie solo clavaba su mirada hacia  su hija Clara, que pasaba las horas bajo aquel viejo olmo, hasta bien entrada la tarde, al igual que lo había hecho ella cuando era pequeña.

Aunque el tiempo era templado, aún quedaban rastros de nieve entre las copas de los árboles y en el tejado de la casa, precepitándose de vez en cuando hacia la tierra. Marie apenas tocaba su té mientras, en el columpio, su hija Clara permanecía inmóvil, cabizbaja y mirando fijamente el suelo, sentada con su blusa y falda de vivas flores y colores, a veces, movía sus zapatos que flotaban en el aire como queriendo caminar sobre la hierba mientras agarraba fuertemente las cuerdas del columpio con sus pequeñas manos blancas como la nieve que la rodeaba.

La bruma iba desapareciendo cuando Paul, en uno de sus interminables viajes hacia la chimenea, derribó al suelo una de las tenazas que estaban apoyadas junto a la pared de piedra, golpeando el suelo de madera y en la tranquila casa sonó como el eco seco de un redoble lejano. Con cara preocupación miró hacia Marie, pero esta seguía sin inmutarse, como si nada que ocurriera en el interior de aquella vieja cabaña pudiera apartarla de su quietud y tristeza, y no apartó la vista de la ventana. 

Paul se acercó lentamente, procurando no hacer ruido, hacia su antigua compañera, se detuvo a apenas un palmo tras  ella y se percató de que el té en su taza estaba intacto y frío.

El rostro de Paul era un reflejo de la culpa, quería hablar con Marie de tantas cosas pero simplemente se limitó a esperar callado. Al cabo de un rato, con voz baja pero amable, se dirigió a ella: 

-"Veo que hoy has puesto castañas al fuego, los dos sabemos que le entusiasman... ¿crees que con ese truco animarás a Clara para que entre en la casa?"

Marie apartó la mano gélida que Paul había depositado sobre su hombro: "Clara está perdida y piensa que la he abandonado".

-"Aún recuerdo las navidades pasadas", (prosiguió Paul), "los tres sentados junto al fuego, cuando nos contabas historias de estos bosques y tu abuelo  hasta altas horas de la noche y nos quedábamos dormidos en el suelo de madera. Éramos... una familia afortunada."

Marie respiraba profundamente y simplemente permanecía inmóvil, guardando silencio, como si Paul no estuviera en la habitación.

Pasaron minutos y Paul suspiró, y si pudiera llorar en ese momento, lo hubiera hecho, y simplemente preguntó con voz apacible:

- “¿Cuándo crees que Clara estará preparada para volver?"

Marie, por un momento, salió de su estado de trance, giró levemente la mirada hacia Paul, y sin dejar de vigilar el columpio, contestó fríamente, reteniendo con dificultad sus lágrimas:

- "Aún sigo siendo su madre y no puedo guiar a mi hija hacia su propia casa, debe ser ella sola quien recuerde lo que pasó la noche del accidente en coche, que tú y ella moristeis en la ambulancia, camino del hospital...y solo así su espíritu podrá descansar".




viernes, 17 de noviembre de 2023

La Autopsia


La Autopsia Animal Post Mortem (necropsia)


    La sala estaba sumida en silencio, solo roto por el suave zumbido de las luces blancas fluorescentes del techo y el esporádico crujir de los guantes de látex del forense. En la mesa de acero inoxidable estaba el cadáver del animal en espera, mientras el forense ajustaba la grabadora que sacó del bolsillo de su bata verde.


-“Registro de necropsia número 00145, macho, adulto", aseveró el forense con voz firme y calmada.


-"Incisión torácica,", añadía dirigiéndose a su pequeño aparato, mientras que con el filo del bisturí iba descubriendo la trama intrincada de tejidos y músculos. Algunos hilos de sangre salían lentamente por la Y perfectamente trazada en el torso.


"Sección longitudinal del tracto digestivo". Las tijeras quirúrgicas y pinzas le permitieron explorar los órganos internos, extrayendo muestras de tejidos con una cucharilla para análisis histopatológicos posteriores más detallados y así poder diagnosticar la presencia de enfermedades.


"... Apertura del tórax completa" ... separaba las costillas e iba extrayendo y observando los órganos, a la vez que los depositaba en un pequeño contenedor que mantenía a su lado, junto a una mesita con el resto de instrumental

Era el turno de la sierra para huesos, que empezó a resonar y se podía percibir el peculiar olor a quemado para poder abordar la cavidad craneal, permitiendo al Dr. Evans examinar el cerebro con minuciosidad. 

"Inspección cerebral completa", registró en la grabadora mientras utilizaba agujas para extraer fluidos cerebrales. 


- Estado: dentro de los estándares aceptables.


 La soledad en cada procedimiento en aquel frío laboratorio era una rutina habitual convertida en un diálogo entre el forense y la grabadora que duró un par de horas más.


-"Evaluación general: Maduración no completa."


    Se apartó de la mesa quitándose sus guantes de látex completamente manchados de sangre y fluidos, los depositó en un cubo, mientras se dirigía al teléfono de la sala, marcando rápidamente el número.


-"Oficina de Investigación Forense, buenos días", respondió la voz al otro lado.


El forense habló pausadamente con la calma que otorga años de práctica y experiencia analizando a la misma especie.


-"Señor Anderson, soy el doctor Evans. He completado la necropsia del espécimen proporcionado en cuestión. El proceso de producción y maduración de la especie del Planeta Granja Alfa-50X1 está dentro de los parámetros normales requeridos, en general, se podría decir, está siendo un éxito y, como indico en el informe que le remito, pronto todo estará listo para la siguiente fase.


-“”¿tiempo estimado para el inicio de la recolección?“” (preguntó el señor Anderson)


-“”En mi opinión, podremos iniciar el periodo de cosecha dentro de dos ciclos solares, y si me permite añadir señor, será excelente.“”


 (Se hizo el silencio y esperó la respuesta del otro lado.)


-Muchas gracias, señor Evans, en breve su laboratorio recibirá el nuevo lote de especímenes humanos capturados procedentes del Planeta Tierra, para que prosiga con sus análisis, como así nos había solicitado. Que pase un buen día.




miércoles, 15 de noviembre de 2023

Convertimos el sosiego en pasión



 Convertimos el sosiego en pasión,

la pasión, en una carrera desenfrenada,

un querer veloz,

donde nuestros corazones competían,

en un fugaz torbellino,

queriendo alcanzar el vértigo de lo inmediato.


Nos quisimos con tanta premura,

y con latido apresurado,

que las caricias se volvieron urgencia,

y nos perdimos en un ritmo acelerado,

en una carrera tumultuosa,

sin metas ni límites.


Olvidamos atrás las miradas,

cerramos ventanas,

y quisimos llenar el vacío,

con destellos fugaces.

y amor desatado,

pero pronto, quedó rezagado,

y lo abandonamos todo.


Intentamos retener lo que quedaba,

fragmentos de momentos 

que entre los dedos se nos escapaban,

pero olvidamos atrás las palabras.


Y gestamos el silencio,

y en la pausa,

ninguno supo decir adiós.



domingo, 12 de noviembre de 2023

tus ojos verdes

 


Anhelo encontrarte cada día,
atrás, en nuestro jardín,
mirarte entre lirios,
descalza sobre la hierba,
envuelta de lino blanco,
ver tus ojos verdes,
ojos que sienten,
que ponen a prueba mi paciencia,
verte y sentir que me miran.

Como dos lagos de aguas profundas,
donde me sumerjo y embriago,
te miro,
me pierdo,
 naufrago en el vaivén, 
entre mis latidos
y tus pupilas. 

En el oasis de tus ojos verdes
me extravío,
y en tu mirar,
despierto desterrado,
bajo la sombra
de un edén de pétalos desplegados,
acariciado por la sombra de un sueño,
y envuelto,
por tus suaves besos esmeralda.



Mis pasos son guiados



 Mis pasos son guiados 

por caminos de tierra,

entre campos polvorientos

que respiran tu ausencia.


Bajo la sombra de las hojas,

tu figura persiste, oculta,

y allá, en la lejanía, resuena tu nombre, 

como eco en labios ajenos,

que fluye con firme presencia.


El sol se rinde, 

y la luna despierta,

cada estrella en la penumbra,

testigo ambulante

de mi interminable espera.


Hojas marchitas caen en procesión,

como lágrimas de la noche, 

y se acumulan en el sendero,

testigos silenciosos,

en esta prolongada calma,

de los días que han pasado

desde el instante de tu partida.


Aunque me quede sin camino,

entre el susurro de las ramas 

y murmullos del invierno, 

he sellado una promesa,

en esta senda enredada

que se despliega ante mis pasos,

donde siempre te espero,

y al alba,  sembraremos nuestro reencuentro.



martes, 7 de noviembre de 2023

Recostado bajo la luna,



 Recostado bajo la luna,

tengo sueños extraños,

mis dedos besan con ternura

 la suave piel de las flores,

los pétalos me hablan y los pájaros,

 me susurran al oído

melodías de viejas canciones.

Los árboles, con sus brazos erguidos,

me saludan, cuando navego por la tierra.

Soy como un niño cansado,

tras jugar con las estrellas, 

y mis pies, descalzos, hallan la paz

 sobre la húmeda hierba fresca.

Recostado bajo la luna,

tengo sueños extraños,

donde el amor duerme profundo,

entre el calor de mis brazos.



sábado, 4 de noviembre de 2023

Sé que no me quieres



 Sé que no me quieres, y lo comprendo, 

somos dos caminos que se bifurcan,

y tu corazón, distante, en cada gesto,

se evade y oculta,

pero sigues siendo un sueño,

que aguarda, y en la espera,

revivo tus ojos esmeralda,

grabados en la levedad de la noche.


Quiero tenerte cerca, tan cerca,

 que al pensarlo, mi alma arde,

pero sé que no me quieres,

y mis certezas, en tu ausencia, 

en silencio se deshacen.


Te has vuelto, hace tiempo,

manantial de agua clara,

y mis manos están manchadas de arcilla,

que me amedrenta volver a acariciarte.


Miedo a que me quieras como antes,

que nos queramos como siempre lo hicimos,

cuando éramos jóvenes en locura,

y nos dejamos llevar por las pasiones,

miedo, a convertirnos en dos seres vulnerables.


Sé que no me quieres, que ya no te quiero,

preferimos mentirnos, sentirnos heridos,

y nos lastimamos en este juego,

de pesados miedos y breves verdades.


En alguna esquina del destino,

entre mis ojos sinceros y tus  labios encendidos, 

sentirás, que aún anhelo tus abrazos,

y a aquel fuego antiguo, 

cuando nuestros corazones danzaron juntos,

y sellamos nuestras almas, 

con el candor de lo prohibido.



viernes, 3 de noviembre de 2023

Siempre imaginé tu corazón



 Siempre imaginé tu corazón

como un océano

de aguas tranquilas,

y yo, intrépido, navego 

por el suave coral de tus labios.


Cuando las olas se alzan,

y golpean la arena,

en las noches de luna llena,

encuentro, la calma 

en tus mareas.


Y en la quietud del alba,

cesan la furia de mis tormentas.


Como el océano,

me envuelve,

me arrastra,

en cada ola,

mi rumbo entrego

bajo el cielo, 

y amanezco

sereno y maldito, 

desnudo en la arena. 


Y en la quietud del alba,

 resucito en tus aguas.



jueves, 2 de noviembre de 2023

La muerte es una promesa,



La muerte es una promesa eterna,

donde la vida, con pasión se aferra, 

y el tiempo, indulgente, la condena.


No hay belleza en la muerte,

solo una vida que yerra,

un murmullo constante

en la creación,

hacia una pausa,

en el seno de la madre tierra,

donde la vida se renueva,

y fluye sin tregua.


Las lágrimas caen

de las nubes entristecidas

adornando el suelo,

que recibe, con sumo cuidado, 

a las almas perdidas

de quienes amamos y dejamos atrás,

como aves que se despiden,

de las hojas caídas,

en el rincón del amanecer,

y el viento arrastra sin pesar.



A quién lates, oh mi pobre corazón,

 


A quién lates, oh mi pobre corazón,

en la inmensa noche,

con tanto fervor,

que caminas imprudente, 

y no atiendes a razón.


Mi alma no entiende tus latidos,

 y se adentra en una triste melodía,

acompasada por tu latir apasionado,

en busca de un amor olvidado,

que el tiempo ha guardado, y tu latir,

 clamor entregado a un instante,

se convierte en herida.


Oh, corazón mío,

en la vasta penumbra,

a quién amas, 

solo tú lo sabes,

y a tu anhelo entregado 

no tengo reproche,

tu latir, en silencio grita,

como llama que se agita,

bajo las cenizas, 

 y a tus latidos, yo me uno,

 en búsqueda, de un prolongado sueño.

¡Partamos amparados, 

por la oscuridad de esta noche¡



Dunes