Aunque mi corazón
fuera un libro abierto
nunca entenderías,
que a cada momento,
y cada instante,
quisiera estar contigo.
Permanecer sentado
bajo un árbol,
hasta que se ponga la tarde,
contemplando cómo escribes,
tan callada,
tan distante,
esas historias de amor,
que nunca hablaron de mí.
Estar junto a ti
cuando brota tu sueño
y anhelas lejanos lugares.
Cuando duermes,
a tu lado,
muero despierto.
Nunca entenderías
que a cada momento,
a cada instante,
quisiera estar contigo,
crucificado en tu silencio.
Ese silencio,
que alimenta mi corazón
y callado arde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sé respetuoso