jueves, 31 de agosto de 2023

Vives con esperanza

 

Vives con esperanza,

creyendo que rescatarás tu alma.


Protestas y gimoteos

brotan de tu pecho,

pero solo extiendes la mano,

como arbol quieto

clamando al cielo

buscando quien te consuele.


Los lamentos

y sollozos

no traen lluvia,

Permanecer sentado

en la quietud de las disculpas

es la necedad persistente

en la mecedora.


No busques que otros

sean tu bálsamo,

avanza,

avanza sin demora,

sin pretextos,

avanza en cada derrota.

Transforma tus heridas en

memoria.


Deja atrás esa coraza

que has construido

que solo te mantiene prisionero

y te vuelve más ciego.


Actúa,

la vida es efímera y frágil,

pues la vida es para

quienes van a morir

y algún día

sobre sus brazos estarás.

Llorar en la tumba

de nada sirve.


Y si lloras, 

que las lágrimas

resuenen en la tierra.

Nutre la tierra húmeda

bajo tus pies,

que al final, en ella,

hallarás tu sitio.



martes, 29 de agosto de 2023

Miro a ese hombre

 


Miro a ese hombre,

ahí de pie, parado,

veo sus ojos huecos,

llenos de interrogantes,

y de pensamientos enredados. 

No puede expresar palabras,

y desde la distancia

siento el temblor de sus huesos

en su mirada. 



Vacila,

su corazón aún late,

y se adentra errante

entre callejones estrechos

evitando la luz. 

No existe otro camino,

y cada paso lo acerca

más a la soledad.

Miro a ese hombre

deambular desolado,

en silencio,

y me pregunto si no estará

muerto por dentro. 

Su languidez me es familiar. 

Me pregunto, si acaso

no seré yo reflejado en el espejo.



Me enamoré de ella,

 


Me enamoré de ella,

de su boca pequeña,

de su mueca,

y sus besos,

de todo su infinito,

y me siento minúsculo,

en delirio.


Me enamoré,

de cada uno de sus pecados,

y solo pienso en hacerlos míos.

Explorarlos uno a uno

y sentir la vulnerabilidad

de cada fragmento

con mis dedos.


Someterme a ellos

y recorrer las cicatrices

de su pecho,

amándola entre mis brazos,

rodearme de su complejidad,

y entregarme entre sábanas,

a la oscuridad,

a sus deseos,

hasta el renacer

con el alba

de nuestros cuerpos.




viernes, 25 de agosto de 2023

La dama y el brujo malvado Poprof


Había una vez

una dama

de tez blanca

que ni leía

ni cantaba.

Vivía en el castillo

 de Moncada

con su familia,

alejada de la playa.

Cada mañana,

su cafecito

muy despacito

 se hacía.

No es que madrugara,

pero  tampoco tarde

se le hacía.

Dos hijas tenía,

la pequeña Paula

y la bella Lucía

sus joyas eran,

como flores, 

que al sol

florecieran .


Les leía historias,

de como su amado

se fue a Oriente

para matar

al Brujo Malvado.


Y los años pasaron,

y el vacío de su alma

con más café

lo iba llenando.


Hasta que un buen día,

cuando la blanca dama

estaba almorzando,

tostadas y café amargo, 

apareció su principe

con la cabeza

del Brujo Malvado colgando.

Y la blanca dama

gritó llorando:

¿pero qué has hecho

mi amado?

Esa cabeza

que llevas colgando

no es del brujo malvado,

tan solo era

un pobre tarado

que escribia poemas

con una mano,

un soñador apasionado,

con su corazón lastimado.

 Paco era su nombre, 

que una vez me hizo

unas pocas letras,

donde vivía feliz

para siempre

junto a mi principe

y mis dos princesas.


 Para la gran familia Rakelota, ellos sabe bien de este poema...

hola Victor :)




¿Qué sientes cuando sabes....?


¿Qué se despierta en ti

al saber que ese instante

será el último de sus besos

y marcará el adiós de sus labios?


En el adiós,

nuestros cuerpos se rozan, 

tu carne contra mi carne

y nos besamos.

Atado a tus labios,

tan cerca,

queman y acarician

sin gotas de dolor.

Los míos, a un paso,

arrancados,

mueren callados.


¿O acaso se quedaron contigo

clavados y sumergidos

en la calma de la demora?


Siento tu piel

aquí mismo,

tu inmensidad tan cerca,

con el calor de la seda 

de tus manos

punzando.

Apenas alcanzo a oir

el sonido de mis labios fríos

siendome arrebatados.


¿Acaso se quedaron contigo

alimentados por el eco del llanto?


Quiero tocar tu aroma

una vez más,

por última vez,

antes de sentir mis pies

al borde del barranco.

Sentir tu boca,

tu cuerpo,

de dulce canela y miel.


El último de tus besos serán

mis grilletes,

el principio de mi condena,

un adiós sin promesas

ni amarres.


Inmóvil y mudo quedaré

sin saber qué responder

cuando me arrebaten tus besos




jueves, 24 de agosto de 2023

Los sueños son

 

Los sueños son como piezas

de un puzle que intentamos componer

con nuestras manos inquietas 

pero son arrastradas por el viento.

Pequeños fragmentos en la brisa

al alcance de las manos

que se desvanecen en el aire.


No podemos tocar

los colores del arcoíris, 

 espejismo de un mosaico

de sueños aguardando,

que se tejen delante,

pero aun así partimos a su alcance.


Las piezas flotan como hojas,

sin dirección fija,

unas veces cercanas,

otras, parecen tan distantes.

El viento juguetea,

 se burla con sutiles engaños,

 las arrastra,

nos seduce,

las dispersa.


A veces, una pieza se posa

en la palma abierta

y si no la cogemos con firmeza,

la pieza se suelta y libera.

Apretar con demasiada fuerza

 la deshace y esparce.


¿Por qué persistimos en la lucha contra el viento?

Nuestro corazón no tiene brújula,

solo espera, que quizás un día,

el viento apacigüe y se calme.





martes, 22 de agosto de 2023

Las palabras fueron creadas



Las palabras fueron creadas

para ser caminos y moldear

nuestra voz errante

como si fueran granos de arena,

 acomodando nuestros pasos desnudos,

que nos llevaron fuera de la caverna.


Fuimos grandes arquitectos

usando nuestros ladrillos del pensamiento.

Pero nosotros, tan virtuosos,

 pronto aprendimos

a darles nuevo cometido.

Humanos somos.


Ahora las usamos a modo cuchillo

con afilado filo,

para cortar los lazos

que hemos urdido.

Nos encanta resquebrajar

ladrillos contra el cemento,

y levantar muros del estruendo.


En este momento,

cuando alguien calla,

el alivio me llega.


La gente habla,

hablan para no escuchar

al que frente a ellos se encuentra.

Es el silencio del ruido,

el ruido de la inexistencia.

El mutismo en la devastación.


Con palabras alimentamos

el frío silencio.

Transformamos el plomo,

y con nuestro nuevo Vellocino

nos perdimos en el vacío.

Si una a una

las palabras os arrebataran,

inventaríamos nuevas armas

para tejer  profundas telarañas.

Porque humanos somos.


Es mi inocente fe,

mirarnos a los ojos,

en silencio todos,

donde nuestras almas se escuchen.


Engullimos palabras

como si fueran semillas

que sustentan la gula.

¿por qué habríamos de estar callados?

¡Sigamos siendo humanos¡


¡Alimentemos

 a las lombrices de la tierra 

con nuestras bocas llenas¡




Dunes