domingo, 21 de julio de 2013

Tus Ojos II (r)

 


Tus ojos,

tu mirada,

mar en calma,

hiedra envenenada.


Ojos negros,

orilla sin dueño

de mis noches en velo,

fuente de mi rezo.


Ojos de nácar

cuando callan,

manantial de secretos,

pozo de mi esperanza.


Ojos de noche estrellada,

suspiros de negra plata,

agitan el roció,

prenden mis lágrimas.

Tus ojos,

tu mirada,

prisión

de mi alma.



jueves, 18 de julio de 2013

¡Ay, si yo pudiera! (r)




¡Ay, si pudiera!
decirte a la cara
cuánto te quiero.

Mirarte a los ojos de cerca,
tan cerca que me hagas sentir
niño pequeño.

¡Si  pudiera!
Bajo la sombra de un olivo,
arrodillado, sin miedos,
rozar tu melena con mis besos.

¡Si  pudiera!
Sin necesidad de estas cuatro letras,
acariciar tus labios, 
bajo las estrellas,
y decirte por qué te quiero.

Que si no fuera por tanto poeta,
¡ay, si yo pudiera!
ahora mismo bajo tus pies,
te pondría el cielo.


Sólo quiero (r)



Solo anhelo que me ames
como solo tú puedes amarme
de mil formas diferentes,
cada una única e inmortal
como a las estrellas,
 que no se desvanecen.

Tantas como los suspiros
que se pierden en mi camino,
cada uno por ese adiós,
que la noche esconde
bajo su abrazo,
y nunca nos dimos.

El deseo que me ames 
de una única forma,
de la misma manera,
en la que, al mirándote a los ojos,
aprendí a amarte.


lunes, 15 de julio de 2013

LXXXIII (r)



 Unamos tu soledad y la mía, 

como versos entrelazados,

en la palma de la mano. 

Cerremos los ojos, 

y compartamos un deseo,

que nazca de nuestros labios,

y  en suspiros se deslice

con el viento.



domingo, 14 de julio de 2013

y si decides de nuevo retomar (r)



...Y si decides regresar,

caminando hacia mi corazón,

porta contigo un ramo

de rosas blancas

y algo de compañía,

pues tras tu última estancia,

cerré puertas y ventanas

y en silencio, hice mudanza.


En lo que fue nuestro rincón

vagabundea el eco de tu nombre.


Arrojé recuerdos por la ventana

escoltados por una lágrima y un deseo.


De nuevo solo regreso,

en cada una de tus noches

peregrinando con mi alma.



lunes, 8 de julio de 2013

Bajo una noche sombría (r)


Bajo un manto de noche sombría,

la mar camina serena,

he venido a avivar la memoria

y sepultar los recuerdos

que me atan la tierra.


Olvidar que en el horizonte

siempre habrá luna,

donde solo hay espejismos,

danzando entre las estrellas,

de una sombra errante.


Dejar de creer que el vaivén,

sin destino ni deriva,

de una ola en la arena,

une dos orillas.


Mis lágrimas son las cenizas

que brotan de una tierra en llamas,

el reflejo de un alma ataviada con espinas

que peregrina por un sendero

que alguna vez fue vida.


He venido a olvidarte junto al mar,

y con cada lágrima,

me traes de vuelta a la vida.



martes, 2 de julio de 2013

A cada segundo, en mi mente (r)



A cada segundo, en mi mente
etérea y constante,
sin pausa.

Callado, en silencio, te miraba,
tras una pequeña ventana.
Nunca supiste cómo te anhelaba
en cada madrugada,
cuando me devolvías una sonrisa
tan solo con tu mirada.

Como los rayos del sol,
que reavivan vetustas ramas
tras una noche de frío y escarcha.

Pero el frío que llegó,
ya no se desvanece.
Añoro tantas cosas de ti,
incluso en tu ausencia.

Para cobijar mi corazón,
manché mis manos de barro,
lo cubrí con pétalos rojos
y recuerdos tuyos,
plantado rosas en mi jardín yerto.

Desearía cerrar los ojos,
y no buscarte
en mis noches de tormenta,
pero aquí sigo,
agotado y rendido,
tratando de no olvidarte.

Intento tropezarme con tu sonrisa
en cada uno de mis versos,
líneas manchadas con lágrimas
y borrones en tinta,
que apenas alivian mi melancolía.

El frío de la noche arrecia pronto,
y me embargaba la soledad,
intentando no olvidarte.

Cada sorbo de café,
es un amargo suspiro para hallarte,
un miedo a que se borren los recuerdos
y te ausentes para siempre.

Miedo a que te conviertas
en un trazo ininteligible,
una mancha de tizón negro,
difuminado en una lámina,
que se borra, con tan solo
el susurro del viento.










Dunes