Vivo de ensueños
y de memorias efímeras.
Esperanzas y cicatrices,
de antiguas luchas perdidas.
De maginar estrellas
y noches olvidadas.
Tenerte en mis brazos,
y lograr alguna de tus caricias.
Besarte en mis sueños,
desembarcar en alguna orilla.
Pero la vida burla,
negándome tu sonrisa,
amarga espera.
No sé cuándo me dio la espalda,
o yo di media vuelta,
pero entre mi pecho y almohada
yace la sombra de tu huella.
Ese cuerpo,
que mi mano no alcanza,
y mi corazón cada noche te llora,
buscando ese consuelo,
que tan sólo tus besos,
en mi alma, provocan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sé respetuoso